Diciembre 29, 2022

Hay una película que me gusta mucho y que ya tiene sus añitos, “El naufrago”. Cuando la vi por primera vez no me resonó tanto como cuando la volví a ver hace tres años. En aquel momento me sentí como ese hombre que en la escena final está en el medio de la ruta con el mapa en la mano decidiendo qué camino tomar. La vida muchas veces nos da un golpe de timón inesperado que nos cambia de rumbo y todos los planes que teníamos en mente. Con el tiempo comprendí que las cosas suceden por una razón y que esa razón está directamente relacionada con nuestra evolución humana, con lo que necesitamos aprender y que así tuvo que ser para la mía. Decidí desconectarme durante dos años de las redes para empezar mi ¨hogar¨ de cero. Una palabra que fue cobrando un sentido profundo en mi vida no sólo como un lugar físico de regeneración sino más bien como algo abstracto que tiene que ver con sentirme en paz y feliz con quien soy. Escribir fue como esa vela que llegó a mi orilla para volver a reencontrarme conmigo y con quienes están del otro lado leyendo estas líneas. Esta es la última publicación del 2022, algo dentro mío siente que es el fin de una etapa y el comienzo de otra nueva. Lo lindo de los comienzos es que abren la puerta a lo nuevo y por ella aparece esa sensación de “posibilidad”. De algo estoy segura, no soy la misma de hace tres años y no se bien que me deparará el camino, pero como dijo Chuck, mañana saldrá el sol y quien sabe que traiga la marea.

Gracias por tu compañía ¡Salud y feliz 2023! ♥
Escrito por © Vanesa G. Paz